La fiscal general de Nueva York pidió a un juez que obligue a Eric Trump, uno de los hijos del presidente estadounidense, Donald Trump, a testificar bajo juramento sobre cuatro propiedades y varias transacciones dudosas de la Organización Trump, y a entregar miles de documentos privados.
Letitia James informó en un comunicado que presentó el viernes una moción ante un juez neoyorquino para que éste obligue a testificar bajo juramento a Eric Trump, de 36 años y vicepresidente ejecutivo del grupo, ya que "estuvo íntimamente involucrado en una o más transacciones bajo revisión".
James investiga desde 2019 al presidente estadounidense y a su corporación luego de que el exabogado de Trump, Michael Cohen, testificó ante el Congreso que las declaraciones financieras anuales del grupo inflaban los valores de algunos activos para obtener mejores condiciones en préstamos y seguros, al tiempo que cotizaban a la baja otros bienes para pagar menos impuestos.
Según la fiscal, también se busca acceder a miles de documentos de la empresa "retenidos de manera errónea".
"Durante meses, la Organización Trump ha hecho declaraciones sin fundamento en un esfuerzo por esconder pruebas de una investigación legal de sus transacciones financieras", alegó James.
"Han retrasado y retenido documentos y han dado instrucciones a los testigos, incluido Eric Trump, de negarse a responder preguntas bajo juramento", añadió.
Eric Trump había aceptado ser interrogado en julio por los fiscales, pero luego dio marcha atrás.
La moción de la fiscal general del estado de Nueva York (este de EEUU) se suma a numerosos expedientes judiciales que involucran a Trump, y es anunciada el mismo día del comienzo de la Convención del Partido Republicano que debe designar oficialmente a Trump como candidato a la reelección en los comicios del 3 de noviembre.
La semana pasada, un juez federal de Nueva York decidió que Donald Trump debe entregar ocho años de declaraciones de impuestos al fiscal de Manhattan Cyrus Vance, un nuevo revés para el magnate republicano, que intenta mantener sus ganancias en secreto. El caso puede terminar nuevamente ante la Suprema Corte, como ocurrió en julio.